Técnico de Nivel Superior en Enfermería
Yorgets Maldonado Méndez es mucho más que una recién egresada de la carrera de Técnico en de Nivel Superior (TNS) en Enfermería. Amante de la música, el canto y los deportes, ha sabido combinar su pasión por ayudar a los demás con su vida familiar. Junto a su pareja, José Coloma, y sus tres hijos, Josefa, Facundo y Matilda, han encontrado su hogar en Ercilla, en la Región de la Araucanía.
En 2021, gracias a la gratuidad del Estado, Yorgets comenzó su camino en la Universidad Arturo Prat, en la sede Victoria, con un objetivo claro: convertirse en una profesional capaz de marcar la diferencia en el cuidado de las personas. Hoy, recién egresada, ya se encuentra trabajando en reemplazos en el CESFAM de Ercilla, donde sigue su pasión de servir a los demás: «Siempre me gustó ser útil al prójimo, y vi la necesidad en los hospitales. Ahí puse toda mi atención», comenta.
Para Yorgets, la UNAP dejó una marca imborrable en su formación profesional y humana. Reconoce que la universidad no solo forma técnicos o profesionales, sino seres humanos con una calidad y cercanía que sobresalen, especialmente en la región de Malleco. «Nos hacen ser profesionales cercanos a los usuarios, con una calidad humana que realmente se nota», señala con orgullo.
Al recordar a quienes fueron sus guías en este proceso, destaca a varios profesores que, con su dedicación, paciencia y cariño, la acompañaron en cada paso. Desde la profesora Jimena Hernández, quien la guió durante los primeros años, hasta Marina Beltrán, quien con infinita paciencia le enseñó a conocer los insumos en medio de la pandemia, cuando la enseñanza online era todo un desafío. También resalta a Iván Vejar, quien la inspiró no solo a aprender inglés, sino a ser una mejor persona, y a Ana Blanco, una profesora que la impulsó a siempre dar el 150% en todo lo que hace.
«Cada uno de ellos dejó una huella en mí. Me enseñaron a no solo ser una buena profesional, sino a amar lo que hago, y eso es algo que llevaré siempre conmigo», expresa Yorgets. También agradece a sus amigas y excompañeras de carrera, Lucía, Nicole, Solanch y Alessandra, quienes han estado con ella en todo momento, formando un lazo que va más allá de los estudios: «Son amigas para toda la vida, de esas que quieres tener siempre cerca.»
Con la mirada puesta en el futuro, Yorgets tiene claro lo que quiere. Su meta es seguir perfeccionándose, especialmente en el área de hemodiálisis, un campo que le apasiona profundamente. «Quiero ejercer mi profesión y seguir aprendiendo, aplicar todo lo que la UNAP me enseñó y dejar en alto el nombre de mi alma mater», comenta con determinación.
A los futuros estudiantes de la carrera, Yorgets les envía un mensaje motivador: «Confíen en la Universidad y en ustedes mismos. No se rindan ante el primer obstáculo, porque la vida se trata de caerse y levantarse con más fuerza. Y lleven siempre con orgullo el nombre de la UNAP.»
Finalmente, en el marco de un nuevo aniversario de su Casa de Estudios, Yorgets envía un afectuoso saludo a la sede Victoria de la UNAP: «Mis más sinceros deseos para esta gran institución que me ha brindado tantas alegrías y satisfacciones. Que continúe formando grandes profesionales para nuestra región.»
Y así, con una sonrisa en el rostro y la mirada firme hacia el futuro, Yorgets Maldonado Méndez sigue su camino, dispuesta a dejar su huella en el mundo de la salud y a seguir creciendo como profesional y persona.
