José Oñate Blanc
Contador Auditor, académico de la Facultad de Ciencias Empresariales
En un contexto mundial de globalización lleno de cambios, los países de América Latina y las organizaciones están en una fase de permanentes reformas hacia la modernidad, de redefiniciones del Rol del Estado y estrategias empresariales ante cambios en los escenarios políticos, económicos y sociales. Esto implica un desafío desde un punto de vista de la gestión, ya que deberá ser fortalecida para responder a los requerimientos de efectividad disponiendo para ello, de líderes que sean parte del Capital Humano avanzado de la organización que puedan comprometerse con esta nueva forma de enfrentar la responsabilidad de la conducción gubernamental y empresarial en un nuevo y desafiante contexto.
Las personas al centro de los procesos no es sólo una frase academicista, sino que realmente se ha comprobado que es la forma de gestionar más efectiva y eficaz. Esto lleva a tener una visión diferente de cómo tratar a los “clientes” sean internos o externos a la organización. Hoy debemos compartir valores y lograr un compromiso real y permanente de aquellos que nos colaboran, así como también de quienes son nuestros usuarios de bienes y servicios.
Este desafío de confianzas y relación permanente nos lleva a innovar en la gestión, en igualarnos en base a estándares internacionales, que hoy por hoy ya no son una alternativa de diferenciación, sino la exigencia mínima sobre la cual construir confianzas y un trabajo a mediano y largo plazo.
El profesional que trabaja en el área de los recursos humanos será, por tanto, una persona multifacética, que deberá ser flexible, innovadora y con grandes conocimientos en el área de gestión. Será capaz de guiar, moldear, acompañar, motivar y controlar que los procesos se cumplan en la forma y fondo dentro de un contexto de valores y ética empresarial compartida.
